
Frágiles y a la vez fuertes
2ª Corintios 4:6-9
Somos vasijas de barro, débiles en nosotros mismos pero fuertes en el Señor, de nosotros depende de que nuestra vasija siga siendo útil, llevando la gloria de Dios y haciendo su función para lo que fue creada, o quede destruida, inservible y para nada se pueda aprovechar.
Predicador: Pedro Martínez